En los EEUU existen lugares realmente maravillosos y fuera del alcance de la imaginación en muchos casos, como por ejemplo, el Lago Grand Prismatic Spring, que se encuentra ubicado dentro del Parque Nacional de Yellowstone, y que dispone de una característica que lo hace verdaderamente único en todo el mundo.
Este fantástico lago se encuentra emplazado sobre un enorme montículo de piedra caliza, la cual tiene unas dimensiones que rondan los 50 metros de profundidad, y unos 90 metros de ancho, tratándose del lago de aguas termales más grande en todo el Parque Nacional de Yellowstone, siendo el tercero a nivel mundial.
Quienes visitan el Lago Grand Prismatic Spring lo hacen precisamente por su característica principal, los colores que lo adornan durante la época de primavera principalmente. Y es que posee un par de factores que afectan tanto su coloración como la de su entorno.
En primer lugar debemos mencionar que estas aguas termales son alimentadas por medio de una serie de grietas y fracturas terrestres, desembocando directamente en el Grand Prismatic Spring, siendo aguas muy ricas en minerales como el sílice, el cual es depositado a sus orillas lo que dota a su entorno de una tonalidad grisácea.
Pero no solo su entorno dispone de colores extravagantes, sino que las mismas aguas cuentan con una serie de bacterias termófilas las cuales se reproducen justamente en época de primavera, y que varían de color en función del rango de temperatura en que se encuentran, por lo que las aguas del Lago Grand Prismatic Spring varían su tonalidad claramente en toda su extensión.
En el centro del lago se encuentra agua a altísimas temperaturas, aunque aparentemente sigue siendo propicia para la vida de estas bacterias, sin embargo en ese rango de calor las mismas presentarían una tonalidad azul, a diferencia de como ocurre en sus orillas, donde las cianobacterias oscilan en colores que van desde el amarillo, naranja, rojo y verde.
Pero este no es el único gran atractivo de este maravilloso lago, y es que todo lo relacionado a los colores parece sentarle bien, basta con decir que durante los días de gran calor e intensidad del sol suele aumentar la condensación del vapor de agua, lo que produce el fenómeno de los arcoíris, ocasionando uno que es capaz de verse a varios kilómetros.
Lamentablemente, este lago cuenta con aguas que se encuentran casi en ebullición lo que hace imposible poder tomarnos un baño en ellas, aunque son todo un espectáculo para los ojos, y suele dejar maravillados a todos los turistas que lo visitan.
Este lugar es ideal para visitar tanto en familia como con nuestra pareja, permitiéndonos disfrutar de un atractivo paseo, y un destino fantástico repleto de colores y una vivacidad muy pocas veces vista en otros espectáculos de la naturaleza.