En el mundo existen cientos de Castillos de distintas épocas, pero cada uno de ellos cuenta con características que lo vuelven único e interesante, sobre todo algunos como el Castillo de Karlstejn, el cual es verdaderamente una reliquia arquitectónica que nos permitirá revivir una época inimaginable y salida de un cuento de hadas.
El Castillo de Karlstejn cuenta con un estilo gótico que lo vuelve sumamente interesante y especial, contando con una imponencia en todos sus aspectos, tanto por sus enormes cúpulas como por sus muros y el paisaje en el cual se encuentra situado.
A esta impresionante edificación se le han realizado numerosas reformas, contando con algunas variantes en su estilo, habiendo pasado por un estilo gótico, neogótico y renacentista, muchas de estas remodelaciones fueron debidas al simple paso del tiempo que ha ido deteriorándolo, además, su torre principal sufrió en algún momento un incendio, debiendo ser remodelada.
Este Castillo se encuentra ubicado en República Checa y se ha emplazado en un lugar sumamente interesante, tanto por su punto estratégico (importante en épocas de contiendas para la que fue construido) como por el atractivo paisaje que le rodea.
Los edificios internos se encuentran construidos de forma escalonada, encontrándose la Torre Well en la parte inferior, y el Palacio Burgrave, si ascendemos encontraremos el Palacio Imperial, que dispone de unos cinco pisos, además veremos la Torre Mariana y al finalizar, el la cima de esta colina encontraremos la Gran Torre, que cuenta con unos 60 metros de altura.
Como actividades que podemos realizar, debemos mencionar que su principal atractivo es el valor histórico que representa, pudiendo deleitar nuestra vista con un bellísimo paseo por sus interiores, recorriendo cada rincón de un Castillo que sabe atesorar muchas reliquias del Antiguo Imperio Romano.
Además, tal y como podemos imaginar, es toda una obra de arte que debemos detenernos a admirar con especial atención a los detalles, permitiéndonos conocer más sobre una época muy diferente a lo que nos toca vivir.
Por si fuese poco, las posibilidades entorno al Castillo son muchas, pudiendo realizar cabalgatas románticas con nuestra pareja, sintiéndonos partícipes de otro mágico mundo, o bien divirtiéndonos con amigos o en familia, pudiendo realizar paseos a la montaña y adentrándonos en lo que la vida en un Castillo representa.
Si quieren saber qué clase de obras de arte podrán encontrar, podemos mencionar que existen unos 129 paneles que han sido pintados por el Maestro Teodorico, además, la decoración es completamente original, contando con piezas que llevan allí desde el siglo XIV. Además, dispone de una réplica de la corona que perteneció al Santo Emperador Romano, y una de San Wenceslao.