Barbados, la isla más oriental del Caribe, es el hogar de la Cueva de Harrison. Esta cueva es una galería impresionante de estalactitas que cuelgan del techo, y de estalagmitas que surgen de la tierra, con ríos de agua cristalina corriendo junto a impresionantes cascadas.

Los visitantes son conducidos en un tranvía eléctrico a través del amplio sistema de cuevas, y en el punto de más bajo nivel son invitados a dejar el tranvía y caminar al lado de una cascada espectacular.

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