La antigua ciudad de Cauno fue un territorio ubicado en la actual Turquía, a pocos kilómetros de la ciudad de Dalyan. Es un lugar muy visitado por los turistas debido a las tumbas de roca que aquí se encuentran y que datan del siglo IV A.C.
La primera mención de Cauno se hizo en el tercer milenio antes de Cristo. Según la mitología, la ciudad fue fundada por «King Kaunos», hijo de «Carian King Miletus» y «Kyane», y nieto de Apolo. «King Kaunos» fue expulsado de la casa de su padre debido a la restricción en la comunicación con la hermana, a la que amaba. Durante la existencia de Cauno, la ciudad fue gobernada por diversos países. Caunos llegó a pertenecer a los persas, carios, jonios, griegos, romanos y bizantinos.
Durante su apogeo, Cauno fue una importante ciudad portuaria. Sin embargo, con el tiempo se convirtió en un lago estancado debido a los depósitos de sedimentos, por lo que los barcos ya no eran capaces de entrar en el puerto de la ciudad. Todo esto provocó un fuerte impacto negativo en las ventas. Muchos ciudadanos quedaron desempleados y abandonaron la antigua ciudad en busca de una vida mejor. Con el tiempo, Cauno se vacío y cayó en el olvido…
Las construcciones más famosas de la ciudad antigua son, sin duda, las tumbas de roca, que aparecieron por primera vez en el siglo cuarto antes de Cristo.
Visitar todas las tumbas de Cauno es casi imposible, ya que algunas de ellas se encuentran a una gran altura y su acceso es muy complicado. Sin embargo, si usted es un arriesgado aventurero, algunas de estas tumbas altas tiene una escalera de cuerda para acceder a ellas.
En total, hay dos tipos de tumbas en la roca: las de los los plebeyos y las de los nobles. La decoración entre unas y otras cambia mucho por lo que será muy fácil identificar a quienes pertenecieron unas tumbas y otras solo con ver sus decoraciones.