En el límite sur del planeta, allá dónde parece que el mundo se termina, se encuentra este bello paraje de la naturaleza. Con nieves eternas y climas extremos, se encuentra la Antartida, o Polo Sur, un lugar al que pocas personas tienen la suerte de llegar.
Este rincón del planeta, es un paraíso lleno de encanto para exploradores, aventureros y también para gente con dinero que puede pagar un crucero que los lleve con todas las comodidades a este lugar tan especial.
La Antártida, también denominado Continente Antártico o Antártica, es un continente que circunda el Polo Sur. Tiene una forma casi circular de 4.500 km. de diámetro y presenta dos pronunciados entrantes que forman una angosta península en forma de «S», proyectada sobre el extremo austral de Sudamérica. Es el continente más elevado de la Tierra, con una altura promedio de 2.000 msnm. El clima es polar, la temperatura media del mes más cálido no supera los 0º C.
En pleno verano (enero), los días en la Antártida tienen luz casi las 24 h del día (a la media noche el Sol «baja» hasta la línea del horizonte para luego volver a «subir» en un movimiento sinusoidal aparente (solo existe desde la perspectiva), en el breve verano antártico las horas en que el sol está más próximo al horizonte son llamadas noches blancas, mientras que durante el extenso invierno los días permanecen en una prolongada penumbra. Al sur del círculo polar antártico hay al menos un día en que no se pone completamente el sol (solsticio de verano) y al menos una noche en que no sale completamente el sol (solsticio de invierno). En el polo sur geográfico el día dura 6 meses y la noche los otros 6 meses.
El paisaje blanco de todo este continente, donde varios países establecieron soberanía, es incomparable. Aunque tiene escasa vegetación y fauna, y muy poca población, excepto por equipos de científicos y militares de distintos países, es un destino turístico muy solicitado por los amantes de la aventura y la naturaleza.
¿Cómo llegar?
La Antártida ya no es un destino imposible para los viajeros. Ahora, los turistas pueden llegar al Continente Blanco por vía aérea y marítima. La travesía por el océano es bastante azarosa y larga; mientras que los vuelos son mucho tranquilos, aunque en ocasiones las condiciones climáticas hacen imposible los despegues.
Datos vía: Wikipedia. es
Foto vía: Diario del Viajero
