Gastronomía
Qué comer
Tanto como el arte y la cultura, la gastronomía es parte vital de la sociedad francesa y es fundamental disfrutar de sus platos y visitar sus diversos restaurantes. En la mayoría de los casos el menú incluye postre, vino y café y, aun, en algunos, una cuarta comida: el queso.
Los panes:
– La famosa baguette, que se cocina y vende en cualquier panadería a mejor calidad que en supermercados. Sus variantes: la ficelle o la flûte
– Pain de campagne (pan de campo): en grandes cantidades y de buena conservación.
– Otros nombres que conviene recordar: Pain d’orage, pain mina, boulot, pain au potimarron, pain aux orties, pain a l’ail pour papilles averties, entre otros.
Pasteles o repostería:
Son importantes en la cocina francesa. Se consumen principalmente las tartines o tostadas con manteca o mermelada, las célebres croissants (medialunas dulces) y el pain au chocolat, variante del croissant relleno con chocolate.
El queso:
El país del queso para algunos, Francia cuenta con alrededor de 400 variantes de esta exquisitez láctea. Algunos de los más famosos son el Roquefort, Camember, Reblochon, Pont l’Evêque, Bleu d’Auvergne, Laguiole, Abondance y Livarot.
Platos regionales:
Cada región tiene sus platos dependiendo de los productos de fabricación local, es interesante recordar algunos nombres para probar en las distintas localidades:
– Cassoulet
– Choucroute
– Fondue (el clásico queso fundido)
– Pot-au-feu
– Boeuf bourguignon
La bebida:
Además del país del queso, la repostería y los panes, Francia es, claro está, el país de los vinos. Muchas regiones tienen “nombres de vinos”, porque de allí es donde tomaron el nombre estas bebidas.
Las más conocidas son las de: Bordeaux, Rhone, Bourgogne y Champagne. Las cuales se dividen en sub-regiones más pequeñas.
Otros vinos llevan el nombre de la uva utilizada en su elaboración: Merlot, Cabernet Sauvignon, Sauvignon, Chardonnay, Pinot…
Dónde comer
– Las «brasseries»o «bistros»: se pueden encontrar en todas las ciudades y ofrecen platos a la parrilla y variedad de opciones de calidad. Aquí podrás consumir un menú completo por €70 a €100.
– Los restaurantes locales como «bouchons lyonnais» en Lyon o las «crêperies» en Montparnasse ofrecen platos regionales de excelente sabor. Los precios del menú rondan los €50.