Atenas es la capital de Grecia y la ciudad más poblada del país. Además de ser considerada como el centro urbano más importante de Grecia, en el contexto internacional, la ciudad ha sido reconocida como uno de los centros históricos más influyentes del mundo occidental. Esto se debe a que en las calles de la antigua Atenas, nació la democracia y toda la cultura occidental. Por lo que realizar un viaje por Atenas es como descubrir un poco de la ciudad que impuso su forma de ver la vida y la política alrededor del mundo.
Si se realiza un recorrido por la ciudad helena, hay sitios que el viajero no se puede perder, como por ejemplo:
El Partenón. Es el símbolo de Atenas y muchas veces es tomado como el símbolo de Grecia. Un viaje por Atenas no puede estar completo sin una visita al templo griego más famoso del mundo. Han pasado cientos de años y el templo todavía permanece en alto, como queriendo dar a entender que la civilización griega está más viva que nunca. El templo fue construido en honor a la diosa Atenea, patrona de la ciudad, por lo que es posible ver aun en la actualidad, las estatutos y algunas pequeñas referencia que dan entender al viajero que el templo fue erguido única y exclusivamente en honor a la que fue la protectora de la ciudad por varios siglos.
El Ágora. Si el Partenón es el símbolo religioso más destacado de la antigua civilización griega, el Ágora es el mayor símbolo de la vida política de la ciudad y el lugar donde surgió el pensamiento de que el pueblo debía estar presente en las decisiones tomadas por el gobierno. El edifico fue utilizado como mercado público y como lugar de encuentro para políticos y ciudadanos comunes.
El Odeón de Herodes ático. Es un importante teatro griego construido a mediados del siglo II para que los ciudadanos pudieran disfrutar de las audiciones musicales que se realizaban en la antigua ciudad estado. La estructura sirvió de ejemplo para la creación de los reconocidos y antiguos teatros romanos que hoy en día se expanden alrededor del mundo. El edifico puede ser tomado como uno de los mayores ejemplos de la importancia de la cultura y la distracción en la antigua Grecia.