A la hora de ir a los restaurantes sobre todo si son restaurante de lujo, la elegancia y saber estar es algo importante a tener en cuenta porque no puedes comportarte como lo harías, por ejemplo, en tu casa, o en un restaurante diferente, de menor categoría.
Aprender las prácticas de buena educación en un restaurante no es difícil, solo has de dejarte seguir por tu instinto. Acciones como gritar, eructar, reír de forma muy sonora, etc. no estaría bien y eso puede hacer que te llamen la atención. Lo mismo hablar demasiado fuerte o incomodar a los otros comensales.