Tras la ciudad de Benidorm, Castellón es el segundo destino más visitado del Levante Mediterráneo. Con algo menos de 300.000 habitantes durante el invierno, cuando llega Verano su población se ve multiplicada debido al buen clima de la zona y a los grandes atractivos turísticos que posee. Como principales monumentos religiosos destacan la Concatedral de Santa María de estilo neogótico reconstruida a partir del año 1936, y el palacio Episcopal.
En cuanto edificios civiles tenemos que visitar el Fadrí, el palacio Municpal, la Lonja del Cáñamo y el Casino antiguo, todos estos edificios de bella factura arquitectónica. Pero si por algo es visitada Castellón es por ser un destino veraniego con buenas playas y buenos restaurantes donde disfrutar de la gastronomía de la zona basada en el arroz. Al norte de la ciudad de Castellón se encuentra el pequeño pueblo de Peñiscola, uno de los mas bonitos de España, merece la pena escaparnos un día de nuestra estancia a esta pequeña localidad que de noche y desde el mar presenta una de las estampas más bonitas de las que se puede disfrutar. Estamos sin duda ante una región en la que podemos combinar la cultura con la diversión y el turismo típico de la época de verano.